Este municipio que se ubica en el corazón de Santander, rodeado por las vertientes de los ríos Carare y Opón, cuenta 35 años de haber sido fundado.
Por ser este un municipio joven es que tiene todas las intenciones de salir adelante y ser reconocido como una tierra productiva, de gente trabajadora y con bellísimos paisajes, pero con grandes problemas de acceso.
Con una población aproximada de 6.600 habitantes, cuyo 90% habita el área rural, Santa Helena del Opón lleva varios años buscando apoyo del gobierno departamental para construir una carretera que lo acerque al progreso.
La ciudad más cercana para los santaheleneros es Vélez a donde se dirigen a buscar las provisiones y artículos de primera necesidad, la distancia entre estos dos puntos de la geografía santandereana es de 76 kilómetros, pero por cuestiones de infraestructura vial, para ir hasta Vélez es necesario disponer de por lo menos dos días, uno para ir y otro para regresar a la tierra santa.
Además, se requiere tener disposición de una motocicleta o de un vehículo 4 x 4 para poder transitar por esta caótica vía que pocas veces al año permite el ingreso del único medio de transporte que llega hasta el área urbana del municipio, una chiva, que en verano puede venir cargada hasta el techo, de personas, mercados, bultos, sobres y razones para los habitantes del municipio.
Es lamentable que un lugar tan acogedor, con gente tan amable, un clima insuperable y tierra tan productora tenga tan pocas posibilidades de sobresalir. Es difícil llegar hasta allí y a pesar de todas las buenas intenciones no se ha podido consolidar ningún tipo de plan se acercamiento con Vélez y menos con Bucaramanga, la capital del departamento.
Es bien sabido que a pesar de que la tierra provee cantidades de exquisitas frutas como mandarina, lulo, cacao, naranja, limón y otros alimentos como el plátano, la yuca, el café y el maíz, ninguno de ellos puede producirse en cultivos, pues no existen medios suficientes para llevar estos productos hasta un territorio comercial, puesto que sacarlos de Santa Helena costaría mucho y la ganancia sería muy poca.
Los habitantes viven en su mayoría de la siembra de pancoger y la ganadería; la cuajada y la leche son los productos que se consumen corrientemente en las casas y tienen muy buena textura y sabor, pero tampoco son comercializables afuera, pues debido a la falta de vehículos de doble tracción o de industrias, no se pueden procesar.
Hay que agregar que en el tema educativo solo cuentan con un colegio de bachillerato en la cabecera municipal y los estudiantes que viven en alguna de las veredas alejadas, tienen que irse a vivir a la zona urbana, pues para muchos es tremendamente difícil ir al colegio y regresar a casa el mismo día. Al terminar la secundaria tienen que trasladarse a Vélez, al Socorro o a Bucaramanga para iniciar sus estudios superiores, de lo contrario deben quedarse en sus fincas a hacer los oficios de la casa y a cuidar sus animales.
Este es un llamado a los lectores, para que conozcan un poco sobre las necesidades de algunos de nuestros más hermosos paisajes colombianos, sobre las insuficiencias y falencias de nuestras gentes y si les es posible ayudar a construir un mejor futuro para estos ciudadanos alejados de todo, pero que existen y trabajan por su tierra y por mejores oportunidades.
Queremos que nos conozcan, queremos su apoyo, buscamos un futuro para nuestra gente. Santa Helena del Opón, Corazón de Santander. http://www.santahelenadelopon-santander.gov.co/
Excelente articulo...
ResponderBorrarNo se quien lo escribió, pero a la verdad eso no importa mucho, lo que si importa es la gran realidad plasmada en ese articulo, que bien vale la pena leer hasta el final. Yo soy Santahelenero y como tal, testigo vivencial de lo que esta publicado en estas lineas. Gracias a quien escribió este articulo, se que puede haber un mañana prometedor para mi tierra, Dios te bendiga. Att, Carlos Andrés Silva Riveros
Por la gracia de Dios: pastor asistente IPUC, El Rocío, Bucaramanga.
http://shemuasemeron.es.tl/
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